INSTINTO BÁSICO. Mediación Ambiental
Antonio Ruiz y Ángel M. Sánchez |
Cualquier
organismo obtiene del medioambiente el sustento necesario para garantizar su
supervivencia, no solo alimento, sino, también, refugio, aire o energía. Por
eso, mantener su equilibrio resulta fundamental para asegurar la vida. Cuidar
el ecosistema para hacer sostenible el uso los recursos naturales y
evitar su desaparición no es una filosofía condescendiente en relación con el
planeta en el que vivimos, ya que afecta directamente a nuestra vida y a
nuestras actividades económicas diarias. Actividades estas últimas
imprescindibles para el sustento de muchas familias. Lo cierto es que las
interacciones de las actividades de los seres humanos en los entornos
naturales, en múltiples ocasiones han quebrado el equilibrio de la
biodiversidad. Un equilibrio necesario para garantizar la sostenibilidad del
uso por las generaciones futuras de los recursos de los ecosistemas naturales,
cuya degradación sigue un rápido incremento. La inadecuada gestión del
medioambiente, más allá de la utilización interesada que algunos grupos
pretendan hacer de ella, además de otros factores de riesgo para la salud, lo
cierto es que ocasiona pérdidas económicas ya en el presente. Sirva de ejemplo
los más de 80 mil millones de euros al año desaprovechados por la mala gestión
de la pesca en los océanos. O la estimación del millón largo de especies de
animales y plantas, de un total de 8 millones, en riesgo de extinción.
La
Mediación, como hemos tenido ocasión de comprobar en anteriores programas, puede
extenderse a diferentes ámbitos. Los conflictos ambientales, donde
aparecen claramente diferenciados el bien que se quiere proteger, es decir el
aspecto ambiental a tratar, y la
situación conflictiva que se genera cuando dicha protección se pone en peligro,
no son una excepción.
Múltiples y muy diversos temas relacionados con el medio ambiente podrían ser susceptibles de su abordaje en procesos de mediación, cuando surge la confrontación de intereses diversos: y así, los usos de aguas, el tratamiento de residuos sólidos, sanitarios o tóxicos, alcantarillado, contaminación, sustancias peligrosas, emanaciones de gas, humo o ruidos, perforaciones y excavaciones en minas, el uso de la tierra, pesticidas, materiales radiactivos, reciclaje,… pero también todos aquellos que tienen que ver con diversos aspectos de las explotaciones agrícolas y ganaderas, la protección de la naturaleza y la vida salvaje.
Para acercarnos a algunos de estos temas,
Comentarios
Publicar un comentario